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Esta canalización se
presentó ante una audiencia en vivo el 8 de Octubre de 2006, en Oisterwijk,
Holanda. La palabra hablada ha sido ligeramente editada para que sea más
legible.
Traducción del inglés
al español por Sandra Gusella
Queridos amigos,
Yo Soy Jeshua. Estoy ante ustedes y les envío mi energía y
amor. Me gustaría servirles de apoyo en estos tiempos
desafiantes.
Este período de transición en la Tierra trae muchas cosas
viejas a la superficie. Viejas energías emergen desde remotos tiempos pasados,
épocas en las cuales ustedes estuvieron encarnados y tuvieron vidas en las
cuales experimentaron muchas cosas. Todas estas viejas capas resurgen ahora.
Hoy quisiera hablar sobre estos viejos tiempos, llevarlos a
una comprensión más profunda de ustedes mismos, de quiénes son aquí y ahora.
Ustedes son seres viejos, ancianos, quienes llevan dentro una gran cantidad de
experiencia. Han hecho largos viajes a través del tiempo y del espacio, y no
sólo en el planeta Tierra.
Por favor permítanme llevarlos atrás hacia el comienzo.
Nunca hubo un comienzo, pero para esclarecer esta historia yo hablo de un
comienzo en el tiempo, porque hubo un punto de partida hacia el largo ciclo de
vidas en el cual ahora ustedes están agarrados.
Los estoy llevando al momento de su nacimiento como un alma
individual, como un ‘yo’ separado. La ‘yo-idad’ que ahora es tan familiar para
ustedes fue un fenómeno totalmente nuevo en el universo. Ser singular y estar
separado les permite a ustedes adquirir un sin número de experiencias, y sí,
ilusiones también. Pero eso no lo hace menos valioso. Es precisamente al ser un
‘yo’, al estar separado de la totalidad, y al experimentar las ilusiones que lo
acompañan, que ustedes puedes descubrir lo
que no es. Pueden descubrir una ilusión y experimentarla desde adentro
hacia afuera. Al principio esto no era posible. Al principio estaba el Uno y
nada había fuera de él, como un océano indiferenciado de amor y de unidad.
¡Ahora traten de experimentar temor e ignorancia desde ahí!
Siendo vulnerable y propenso a la ilusión ustedes
adquirieron una enorme cantidad de experiencia, lo cual les permite realmente
entender qué significa la unidad, qué significa el amor al nivel de la experiencia. Ustedes comprenderán qué es el amor, no
como un concepto abstracto, sino como una fuerza viviente, creativa, que los
emociona y que llena su corazón y su espíritu con una profunda sensación de
alegría y de satisfacción. Esta es la meta final de su viaje, el regreso al
hogar que ustedes están anhelando: ser como Dios, experimentar la unidad como
un ‘yo’. Ustedes no quieren entregar su ‘yo-idad’. Es a través de la conexión
de su ‘yo’ con el todo que ustedes experimentan la alegría más profunda y que
agregan su propio sello de energía único a toda la creación. Ser como Dios
agrega algo nuevo y precioso a la creación.
Yo les pido que regresen al momento en el cual este ‘ser un
yo’ tomó forma por primera vez. En aquél entonces ustedes fueron, o fueron creados
como, ángeles. ¿Pueden sentir la ternura y la inocencia de esa energía original,
aquél lejano comienzo en el cual ustedes por primera vez fueron ‘moldeados’,
llegando a conocer la ‘forma’? De repente fueron ‘ustedes’, distintos y
separados de los otros que los rodeaban, y experimentaron el milagro de ser un
individuo. Aún estaban tan cerca de la fuente de luz divina, que fueron
llenados con amor y rebosaron de alegría y de creatividad. Hubo en ustedes un
increíble deseo de experimentar, de saber, de sentir y de crear. Por favor vayan
adentro por un momento, y vean si pueden sentir la verdad de eso: que ustedes
son un ángel en su parte más profunda….
Ahora doy un gran salto en el tiempo, ya que sólo puedo dar
un amplio resumen de esta larga historia. Los llevo al comienzo del planeta
Tierra. Ustedes estuvieron presentes ahí, ustedes son más viejos que la
existencia de la Tierra como un planeta físico. Su nacimiento como una
yo-conciencia primitiva se halla mucho más atrás que el origen de la Tierra.
Ahora imaginen que ustedes estuvieron contribuyendo al
desarrollo de la vida en la Tierra. Lentamente la vida evolucionó en la Tierra,
a través de la presencia de elementos materiales los cuales ofrecían un amplio
rango de posibilidades para que las conciencias encarnaran en formas materiales
o cuerpos: minerales, plantas, y más tarde animales. Y ustedes estuvieron
profundamente implicados en este proceso de creación. ¿Cómo?
Ustedes fueron los ángeles y devas quienes sustentaron y
nutrieron al reino vegetal, quienes conocieron íntimamente el ‘tejido de la
vida’ en la Tierra y lo cuidaron profundamente. Ustedes también han suplido a
formas de vida animal con amor, cuidado y nutrimento etérico.
Ustedes llevan dentro recuerdos del ‘paraíso’ o del Jardín
del Edén, de una naturaleza perfectamente equilibrada en la cual participaban
como cuidadores y custodios de la vida, emanando de esta antigua época. Ustedes
aún no estaban encarnados entonces, sino rondando entre los reinos etéreo y
físico. Ustedes eran un ángel a punto de nacer dentro de la materia.
Recuerden la inocencia de aquella época, recuerden cómo era
ser este ángel-deva-conciencia y cuán profundamente amaban a la Tierra y a
todas las manifestaciones de vida en ella. Sientan el aspecto inocente de su conciencia
en aquél tiempo atrás. Ustedes eran como niños jugando en el paraíso, siempre
con ánimo para aventuras, bromeando, riendo, experimentando la alegría de
expresarse libremente en un lugar seguro. A pesar de su naturaleza juguetona,
ustedes sentían gran admiración por las leyes de la vida guiadoras y ustedes no
habrían pensado en tratar a las formas de vida con nada más que profundo afecto
y respeto.
Entonces, en algún sentido ustedes han sido los padres de
la vida en la Tierra. Esto explica por qué pueden ser totalmente shockeados por
las alteraciones de la naturaleza causadas por la tecnología moderna, y el
abuso general de las fuerzas de la naturaleza. ¿Por qué esto los afecta así? Es
porque ustedes han apreciado y nutrido a estas verdaderas energías desde el
comienzo. Desde su esencia ustedes están conectados a eso, a la Tierra y a sus
muchas formas de vida, como un padre lo está con su hijo y un creador con su
creación. Y en aquél tiempo atrás cuando ustedes eran ángeles nutriendo a la
vida en la Tierra, ustedes no sabían por qué estaban haciendo eso. Actuaron
como niños que se sienten atraídos por el llamado de otra aventura, la excitación
de lo nuevo, y se dejaron llevar simplemente por lo que ustedes sentían como alegre
y excitante. Ustedes plantaban su energía en cualquier lugar donde fuese
bienvenida.
Así, ayudaron a crear el paraíso en la Tierra: el esplendor
de la vida, la abundancia de los reinos vegetales y animales, la diversidad de
las formas de vida y el natural desarrollo de todo eso. Por favor sostengan
bien esta imagen por un momento………recuerden quiénes son.
Incluso si esto parece demasiado grandioso, cuando yo les
cuento esto, tan sólo permítanse fantasear con que ustedes formaron parte de
esto, con que estuvieron presentes como un ángel en ese Jardín de la Vida,
travieso, inocente, nutriendo y acariciando la vida.
Fuera
del paraíso – la primer caída en la Experiencia
Muchos acontecimientos tuvieron lugar en la Tierra durante
millones de años, los cuales son difíciles de describir en pocas palabras.
Pero, en un cierto punto en el tiempo, su dichosa aventura en el Jardín del
Edén fue perturbada por una influencia externa, la cual podría ser llamada
‘mala’ u ‘oscura’.
Desde otras dimensiones en el universo, determinados seres
comenzaron a entrometerse en la Tierra. Su propósito era ejercer poder e
influencia sobre la vida en la Tierra. Este hecho, la interferencia de energías
oscuras poderosas las cuales desde su punto de vista surgieron de la nada,
conmocionaron profundamente su naturaleza angelical. Ustedes no estaban
preparados. Este fue su primer encuentro con la ‘maldad’ y sacudió su mundo
hasta sus cimientos. Por primera vez experimentaron lo que era ya no sentirse
más a salvo. Llegaron a conocer las ‘emociones humanas’: miedo, shock, ira,
desilusión, aflicción, indignación: ¡¿qué
es esto?, ¿qué está sucediendo aquí?!
Sientan cómo cayeron las sombras sobre ustedes en aquél
primer encuentro con la oscuridad, el lado oscuro de la dualidad. Lentamente,
el ansia de poder, que los había shockeado y horrificado, comenzó a tomar
posesión de ustedes mismos. Esto fue porque ustedes sintieron indignación y
cólera hacia los atacantes, y quisieron defender y proteger a la Tierra contra
esta extraña invasión.
Hablo de una influencia extraterrestre, una cierta raza
como quien dice, de la cual para nuestro relato no importa mucho el origen. Lo
que importa es que ustedes absorbieron parcialmente la energía de estos seres,
y así provocaron una caída. Yo no
hablo de una Caída bíblica, tal como se asocia a esta frase con el pecado y la
culpa, sino de una caída en la
experiencia, en la oscuridad, lo cual en un sentido estuvo ‘predestinado’
porque ustedes eran parte del mundo de la dualidad. Al ser un ‘yo’, al
experimentar la separación de la totalidad, las semillas de la dualidad
nacieron dentro de ustedes. Es parte de la lógica de la creación que ustedes
explorarán todos los extremos de la dualidad, una vez que estén en ella.
Gradualmente ustedes mismos se volvieron guerreros, en
cuanto desearon el poder para proteger su ‘territorio’. Un nuevo escenario
sobrevino en su historia, en el cual ustedes quedaron enredados en varias
guerras y luchas galácticas. Por favor tómense un momento para sentir este
suceso, la caída desde la energía juguetona del ángel-niño hacia la cruel y colérica
energía de los guerreros galácticos. Estamos hablando de largos períodos de
tiempo. Debe parecer algo enorme e insondable que ustedes hayan pasado por todo
esto, aún así yo les pido que dejen que su imaginación viaje conmigo por un
momento.
Ustedes quedaron enredados en una feroz e impresionante
batalla. Parte de la literatura de ciencia ficción familiar para ustedes,
describe todo esto y está realmente inspirada en hechos reales de un pasado
distante. No es mera ficción. Mucho ha sucedido realmente y ustedes estuvieron
profundamente implicados en eso. Ustedes se perdieron a ustedes mismos en la
lucha por el poder y durante esta etapa de su historia experimentaron
completamente la energía del ego.
Yo he hablado de esto anteriormente en la serie de los
Trabajadores de la luz (publicado en este sitio), y ahora quiero dar otro gran
salto enorme y contarles cuál fue la siguiente etapa importante.
Después de un largo, largo tiempo, ustedes se cansaron de
luchar. Habían tenido suficiente. Se estaban sintiendo tristes y hastiados de
pelear, y una clase de nostalgia comenzó a notarse en sus corazones. Habían
estado mucho tiempo obsesionados con las guerras y los conflictos en los cuales
estaban implicados. La ilusión de poder puede ejercer una influencia hipnótica
sobre una mente naïf, inexperta. Ustedes eran naïf e inexpertos cuando
experimentaron su primer caída a la oscuridad.
Pero luego, en un cierto punto, ocurrió un despertar dentro
de ustedes. Un vago recuerdo de los antiguos días en el Paraíso se agitó en sus
mentes y en sus corazones, recordándoles el ustedes alegre e inocente que una
vez conocieron. Ustedes desearon poder volver allá y ya no quisieron luchar
más. Uno podría decir que las energías del ego se habían agotado en ustedes,
por la completa experiencia de eso. Habían conocido todos los lados de la
batalla, el rango completo de emociones que tienen que ver con ganar y perder,
controlar y rendirse, ser asesino y asesinado. Habían llegado a desilusionarse
del poder y habían descubierto que el poder no les da lo que promete: amor,
felicidad, satisfacción. Despertaron de su adormecimiento hipnótico y desearon
algo nuevo.
Cuando ustedes llegaron a alzarse por encima de la energía
de lucha, y se conectaron a la energía del corazón, fueron otra vez naïf e
‘inexpertos’. Fueron como niños que estamparon su cabeza contra la muralla de
un país completamente nuevo, en el cual ni la lucha ni el poder eran las
fuerzas dominantes sino el amor y la conexión. Ustedes siguieron el llamado de
su alma y treparon la pared. Y comenzaron a encontrarse nuevamente y a
reconocerse unos a otros como compañeros de alma, miembros de la misma familia.
Alguna vez habían jugado juntos como ángeles en el Jardín del Edén.
Los miembros de la familia de trabajadores de la luz,
quienes son parte de una misma ola de nacimiento de almas, se respetaron unos a
otros otra vez y se sintieron atraídos por un llamado común, una misión
compartida. Ustedes sabían que tenían que hacer algo para construir el mayor escalón
hacia la conciencia del corazón. El regreso al Paraíso, en realidad sucede para
ustedes. Una vez más sintieron que tenían compromisos con la Tierra, pero esta
vez como un ser humano, encarnado en un cuerpo humano, para experimentar desde
adentro qué había sucedido en la Tierra debido a las guerras galácticas y a su
abuso de poder.
En su lucha por el poder, la Tierra había sido siempre el
punto focal de atención. Muchos bandos galácticos batallaron por el dominio en
la Tierra y esto afectó negativamente a la Tierra, a toda la vida sobre ella y
al alma colectiva de la humanidad en evolución. La razón por la cual la Tierra
era un blanco tan importante para todos estos bandos galácticos no se puede
explicar fácilmente. Expresándolo brevemente, la Tierra es el punto de partida
de algo nuevo: es un lugar que reúne muchas dimensiones y realidades diferentes
y por lo tanto constituye una encrucijada hacia el futuro. Muchas, muchas energías
se encuentran y se combinan todas juntas en la Tierra – dentro de los reinos
vegetal, animal, y especialmente el humano. Esto es muy especial. Cuando estas
energías puedan coexistir todas juntas pacíficamente, causarán una enorme
explosión de luz por todo el cosmos. Es por esto que la Tierra está jugando un
rol clave y la razón por la cual ella ha estado en el centro de una gran
Batalla.
Alguna vez ustedes fueron parte de esta batalla, como
ofensores, tratando de manipular la vida y la conciencia sobre la Tierra de una
manera totalmente agresiva. Esto causó daño en el desarrollo del ser humano. La
humanidad estaba entonces en su etapa infantil, la ‘etapa de la inocencia’. La
humanidad estaba ‘habitada’ por almas que eran de una ola de nacimiento
diferente a la de ustedes. Nosotros las hemos llamado ‘almas Terrestres’ en la
serie de los Trabajadores de la luz. Era un grupo de almas más joven que
ustedes, quienes se habían manifestado en la Tierra anteriormente y habían
tenido que tratar con manipulaciones externas extraterrestres las cuales
redujeron las capacidades del ser humano. Las fuerzas extraterrestres
proyectaron energías de miedo y de inferioridad dentro de la conciencia joven y
abierta del hombre. Esto les permitió ganar control sobre ellos.
Ahora vuelvo a su decisión de encarnar en la Tierra como un
ser humano. Ustedes tenían dos motivos. Primero, sentían que estaban preparados
para un cambio y una transformación interior. Ustedes querían soltar la actitud
luchadora del ego y crecer hacia otra forma de ‘ser’. Ustedes no sabían qué
significaba esto exactamente; aún no podían comprenderlo plenamente, pero
sentían que encarnar en la Tierra les ofrecería precisamente los desafíos y las
posibilidades que necesitaban.
Segundo, ustedes sabían que tenían que compensar por las
cosas que habían sucedido en la Tierra, parcialmente debido a su actuar. De
algún modo ustedes sintieron que, originalmente, tenían un profundo vínculo con
la Tierra basado en el amor y en el respeto mutuo, y se había corrompido cuando
ustedes se dejaron enredar en la guerra y en la batalla por esta misma Tierra.
Sus dos extremos, el de ángel-niño y el de guerrero endurecido, necesitaban ser
reunidos y transformados, ¿y qué lugar podría haber sido más apropiado para
esto que la Tierra? Ustedes se sintieron
profundamente conectados a este planeta y también sintieron una ‘obligación
kármica’ de mejorar las condiciones en la Tierra. Desearon cambiar y elevar el
estado de la conciencia en la Tierra. Entonces se volvieron ‘trabajadores de la
luz’.
Ustedes encarnaron en la Tierra en la época de la
Atlántida.
La
Atlántida – la segunda caída en la Experiencia
La Atlántida fue una civilización que se extiende mucho más
atrás en el tiempo que su era histórica familiar. La Atlántida se originó
gradualmente hace unos 100.000 años y llegó a su fin alrededor de 10.000 años
atrás. Los primeros comienzos incluso antedatan los 100.000 años. La Atlántida
evolucionó gradualmente cuando las razas extraterrestres comenzaron a ‘invadir’
la Tierra al encarnar realmente en cuerpos humanos. Estas almas en general
tenían un elevado nivel de desarrollo mental. En aquel tiempo, las sociedades y
las comunidades en la Tierra estaban compuestas por almas Terrestres, y eran
‘sociedades primitivas’ como ustedes las llaman.
Hubo, incluso antes de la Atlántida, muchas influencias
extraterrestres en la Tierra, de reinos galácticos que de diversas maneras
enviaban formas de pensamiento a la Tierra. Las formas de pensamiento son
energías que se conectan a los humanos al nivel etéreo o áurico, y así
influencian los pensamientos y las emociones de las personas. Esto sucede
continuamente cuando ustedes absorben ideas y formas de creencias de su educación
y de su sociedad. Estos los rodean como una red infecciosa. Pero también puede
suceder desde los ‘niveles astrales’ que los rodean. Las formas de pensamiento
proyectadas sobre ustedes por los guerreros galácticos fueron en general
controladoras y manipuladoras, pero siempre ha habido también influencias de
luz y de bondad. Es el humano mismo quien decide qué permite y qué no. En un
cierto momento, los bandos galácticos desearon tener una influencia más
profunda en la Tierra y hubo una oportunidad para ellos para realmente habitar
cuerpos humanos, en resumen para encarnar en la Tierra. El Espíritu o la Vida
abrió esta posibilidad para ellos porque se ajustaba a su camino interior de
desarrollo. Ustedes fueron uno de estos bandos. En su literatura espiritual, a la
gente que proviene de estos reinos galácticos a menudo se las denomina ‘gente
de las estrellas’ o ‘semillas estelares’.
La Atlántida fue el resultado de una reunión, una mezcla de
las sociedades Terrestres nativas y la afluencia de almas que venían ‘desde
afuera’. Ustedes, la ola de las almas trabajadoras de la luz, encarnaron en la
Tierra porque deseaban generar cambio y progreso y porque querían crecer
ustedes mismos, desde una conciencia basada en el ego a una conciencia basada
en el corazón.
Cuando ustedes llegaron, se sentía muy torpe e incómodo al
comienzo, estar dentro de cuerpos humanos físicos. Vivir en tal materia física
densa les daba a ustedes una sensación de opresión y de aprisionamiento, ya que
ustedes estaban acostumbrados a cuerpos mucho más fluidos y volátiles, que
poseían más poder psíquico. En las frecuencias o dimensiones superiores (menos
materiales o densas), su psiquis tiene una influencia directa mucho más grande
sobre el entorno material. Por simplemente pensar en, o querer algo, ustedes
pueden crearlo o atraerlo inmediatamente hacia ustedes en estos planos. Sus
mentes estaban acostumbradas a crear de manera mucho más rápida de lo que era
posible en la Tierra. Ustedes podrían decir que el tiempo de reacción en la
Tierra es mucho más lento. Entonces cuando ustedes están aquí por primera vez
tienen la sensación de que están de algún modo trabados dentro de un cuerpo sólido
y rígido y se sienten inseguros, ya que su deseo y aspiración ya no se
materializa más tan fácilmente y su continuar con su vida y con las
circunstancias parece estar totalmente limitado.
Entonces ustedes se sintieron confundidos cuando llegaron
aquí. Al mismo tiempo, tenían habilidades mentales altamente entrenadas que
fueron desarrolladas durante sus vidas galácticas anteriores. Enviar formas de
pensamiento y proyectarlas hacia otros seres vivos, requiere que ustedes posean
bastante poder psíquico. Su mente era como una serie de cuchillos afilados, los
cuales tenían que probar su valor en un ambiente completamente diferente. Sus
capacidades mentales entrenadas eran un viejo logro, y debido a esta sensación
de alienación y de opresión que ustedes experimentaban en la Tierra,
instintivamente trataron de hallar su camino aquí usando este viejo logro. Así
ustedes comenzaron a ejercer sus poderes mentales en la Tierra. Originalmente,
su intención había sido conectarse con la realidad de la Tierra desde el corazón.
Antes de que encarnaran, ustedes sabían eso, a pesar de sus formidables poderes
analíticos y psíquicos, los campos de su corazón estaban en barbecho y
necesitaban semillas, pequeñas plántulas de luz. Esto, sin embargo, ustedes lo
‘olvidaron’ cuando se zambulleron en la realidad de la Tierra y su conciencia
se veló.
En la Tierra, ustedes tuvieron que tratar con las almas
Terrestres, quienes vivían ahí como seres humanos, y ustedes no los comprendían
bien a ellos. Ustedes pensaban que ellos eran seres barbáricos e instintivos.
Ustedes no comprendían su modo directo, espontáneo de expresar emociones. Ellos
eran primitivos a sus ojos, ellos estaban más sintonizados con sus emociones e
instintos que con sus mentes. Ustedes tenían habilidades y facultades que eran
diferentes a las inclinaciones naturales de la gente de la Tierra.
Aunque ustedes frecuentemente nacían y eran criados como
sus hijos (cuando nacían de padres de alma Terrestre) gradualmente se
desarrolló una divisoria social entre ustedes y ellos. Debido a sus habilidades
mentales superiores, ustedes desarrollaron tecnologías que antes eran
desconocidas. Todo esto sucedió lentamente y naturalmente. Hablamos de miles,
incluso diez mil años de tiempo.
Sin entrar en detalle sobre este proceso, yo quiero
pedirles que sientan la esencia de lo que estuvo sucediendo aquí. ¿Pueden
imaginar que ustedes fueron parte de esto? ¿Pueden imaginar cómo se debe haber
sentido el terminar en algún lugar en el que ustedes no se sentían
verdaderamente en casa y saber: hay algo que yo planee hacer aquí, pero qué
es…? Déjame ver, tengo ciertas habilidades y poderes a mi disposición…… esto me
distingue de muchos otros en mi entorno…….. haré uso de estos talentos para
imponerme. ¿Reconocen esta clase de altivez y ambición dentro de ustedes?
¿Pueden recordar que fue de ustedes? Esta es una energía típica de la Atlántida.
Gradualmente, una nueva cultura se originó en la Tierra,
una civilización que produjo un desarrollo tecnológico sin precedentes que
afectó a todas las partes de la sociedad. Quisiera decir un poco más acerca de
la clase de tecnología que evolución en la Atlántida. Lo que ustedes como
‘gente de las estrellas’ aún recordaban claramente, a pesar del velo del
olvido, era que ustedes pueden influenciar la realidad material usando el poder
de su mente, especialmente el tercer ojo. El tercer ojo es el centro de energía
(chakra) de la intuición y del conocimiento psíquico, y está localizado detrás
de sus dos ojos físicos.
El poder del tercer ojo aún era muy familiar para ustedes
en aquellas primeras encarnaciones, como una segunda naturaleza para su alma.
Ustedes sabían ‘cómo funcionaba’. Ustedes sabían que la materia (la realidad
física) tiene una forma de conciencia, es
conciencia en un cierto estado del ser. A través de este discernimiento
esencial sobre la unidad de la conciencia
y de la materia, ustedes podían afectar y formar materia, estableciendo un
contacto interno con la conciencia en la porción de materia. De este modo,
ustedes literalmente podían mover la materia, manipularla desde la mente.
Ustedes sabían un secreto que fue olvidado en los tiempos más recientes.
Actualmente, ustedes ven a la materia (la realidad física)
como separada de la conciencia (la mente). Influenciados por la ciencia moderna,
ustedes han olvidado que todos los seres tienen alma: todo lo que es tiene
alguna forma de conciencia con la cual ustedes se pueden conectar y cooperar de
un modo creativo. Este conocimiento era patente para ustedes en aquellos
tiempos antiguos. Pero, durante la Atlántida, cuando sus centros del corazón no
habían sido despertados plenamente, su tercer ojo era controlado
predominantemente por el centro del deseo o del ego (el plexo solar o tercer chakra). Ustedes estaban parados en el umbral
de una nueva realidad interior, la realidad de la conciencia basada en el
corazón, pero debido al shock de estar sumergido en la realidad densa de la
Tierra, sus inspiraciones tiernas y frescas se perdieron temporalmente. Ustedes
se dejaron descarriar por el uso excesivo del deseo mezclado con el poder del
tercer ojo. Aspiraban a mejorar las cosas a una mayor escala (‘trabajo de la
luz’) pero ustedes lo hicieron de un modo egocéntrico, con una actitud
autoritaria hacia las almas Terrestres y hacia la naturaleza.
En el auge de la Atlántida había muchas posibilidades y la
tecnología era altamente avanzada, en algunas áreas incluso más que su
tecnología actual, porque el poder de la telepatía y de la manipulación
psíquica se utilizaba y se comprendía mucho mejor. La comunicación instantánea,
telepática tenía lugar entre diferentes personas que se hallaban a gran
distancia uno del otro. Era posible dejar el cuerpo concientemente y viajar por
los alrededores. La comunicación con civilizaciones extraterrestres se buscada
con afán y era efectuada.
Muchas cosas llegaron a ser posibles durante la Atlántida,
pero mucho salió mal también. Había generalmente una divisoria entre la elite
política-espiritual y la ‘gente común’, que estaba constituida
predominantemente por almas Terrestres. Ellos eran considerados como seres
inferiores, un medio para conseguir un fin, y ellos realmente fueron usados
para experimentos genéticos que formaron parte de la ambición de la Atlántida
de manipular la vida al nivel biológico, de modo que pudieran ser creadas
formas de vida superiores.
Un aspecto positivo de la sociedad de la Atlántida, dicho
sea de paso, era la igualdad del hombre y de la mujer durante esa época. La
batalla de poder entre el hombre y la mujer, en la cual las mujeres fueron
horriblemente oprimidas durante la última etapa, no formó parte de la
Atlántida. La energía femenina era totalmente respetada, especialmente porque
está directamente relacionada con el poder del tercer ojo (intuición,
clarividencia, poder espiritual).
Ahora quiero llevarlos hacia el derrumbe de la Atlántida. Había allá energías en juego con las cuales ustedes aún están tratando de llegar a un
acuerdo. Ustedes estuvieron profundamente comprometidos con lo que salió mal en
aquella época. En la
Atlántida, ustedes vivían desde los centros del deseo y del
tercer ojo. Su energía del corazón no era significativamente accesible. En un
cierto punto, ustedes se enamoraron de las posibilidades que ofrecía su propia
tecnología y de la ambición de crear formas de vida superiores. Ustedes
aplicaron ingeniería genética y experimentaron con varias formas de vida, y no
fueron capaces de comprender, de sentir,
que con esto estaban siendo irrespetuosos con la Vida. Aquellos sobre los cuales experimentaron no contaron con su empatía y compasión.
La energía presente en esta etapa de perversión en la
civilización de la Atlántida retornó específicamente en el siglo XX como el
régimen Nazi en Alemania. La experimentación cruel y la actitud general de
frialdad analítica hacia las ‘formas de vida inferiores’ fue una parte substancial
del régimen. La falta de compasión y empatía desplegada hacia las víctimas, la
falta de emoción y el modo mecánico de ‘tratar’ con las víctimas, fue similar a
la actitud en la Atlántida. Esto ahora los llena con una profunda sensación de
horror. Ustedes han visto y sentido el otro lado de esto, el lado de víctima,
en vidas que vinieron después de la Atlántida.
Pero durante la Atlántida, ustedes fueron el ofensor. Ahí
fue donde sobrevino un ‘karma’ particular. La Atlántida es la clave para sus
‘vidas de ofensores’, su lado oscuro. Yo les estoy contando esto, no para
hacerlos sentir avergonzados o culpables, de ningún modo. Todos nosotros somos
parte de esta historia, adoptando diferentes roles y disfraces, y esto es lo
que es estar en la dualidad. Es
experimentar y jugar todos los roles concebibles, desde la pura luz hasta la
pura oscuridad. Si ustedes se permiten conocer su lado oscuro, si pueden
aceptar que también jugaron el rol de victimario, van a estar más equilibrados,
libres y alegres. Es por esto que yo les cuento esto.
En un determinado momento, los desarrollos tecnológicos que
ustedes – y otros grupos de almas – buscaron, tuvieron tal impacto sobre la
naturaleza, que los sistemas ecológicos en la Tierra se interrumpieron. La
caída de la Atlántida no sucedió de repente. Hubo muchos signos de alerta –
señales de la naturaleza – pero al no ser escuchadas, ocurrieron enormes
desastres naturales por los cuales la civilización de la Atlántida se inundó y
se destruyó.
¿Cómo los afectó esto al nivel interno? Fue una experiencia
shockeante, una experiencia traumática; fue otra Caída, una segunda Caída de
Experiencia en lo profundo.
Durante sus encarnaciones en la Tierra, ustedes habían
finalmente perdido la conexión con la energía del corazón que habían alcanzado.
Más que nunca, después del derrumbe de la Atlántida, ustedes se dieron cuenta
de que la verdad no iba a ser hallada al controlar
la vida, incluso si el propósito parecía noble. Entonces ustedes comenzaron
a abrirse realmente a la voz suave del corazón, la cual les dice que hay una
sabiduría penetrando la Vida misma, que no necesita ser manejada o controlada.
En el flujo de la vida misma, en el flujo del corazón y de los sentimientos hay
una sabiduría con la cual ustedes pueden sintonizarse, o alinearse, escuchando
y rindiéndose. No es una sabiduría creada desde la cabeza o por el deseo, es
una sabiduría que viene de permitir una perspectiva superior, la voz del amor.
Este conocimiento místico, que es acompañado por un sentido
de humildad, ustedes comenzaron a sentirlo desde adentro. Pero incluso
entonces, el tiempo no estaba aún maduro para un despertar alegre de las
energías del corazón. Una sombra había caído sobre ustedes durante la
Atlántida, la sombra de haber afectado negativamente a otros seres. Las
consecuencias de esto tendrían que ser profundamente sentidas y experimentadas
por ustedes antes de que el despertar pudiera tener lugar.
Otra vez doy un gran salto en esta vieja historia, y los
llevo al momento en el que ustedes regresan a la Tierra, después de que la
Atlántida había desaparecido, arrastrada por las olas del océano. Una vez más
ustedes encarnaron en cuerpos humanos, el recuerdo de la Atlántida enterrado
bien en lo profundo de su memoria del alma, unido con una sensación de
vergüenza y de desconfianza en sí mismo. El derrumbe de la Atlántida los había
aturdido y desconcertado, pero también había dejado sus corazones un poco más
abiertos.
¡Qué enormes acontecimientos tuvieron lugar en semejante
escala de tiempo!
Rechazo
como un trabajador de la luz – la tercer Caída en la Experiencia
El siguiente ciclo importante comenzó con la llegada de la
energía Crística en la Tierra, más visiblemente representada por mí. Muchos de
ustedes estuvieron presentes en aquél entonces o aproximadamente en aquél
tiempo. Algunos siglos antes de mi nacimiento, ustedes comenzaron a encarnar
otra vez en grandes números. Una voz los atrajo, los convocó desde su corazón.
Ustedes sintieron que ‘tenían que estar ahí’, que era el momento para ustedes
de dar otro paso en su viaje espiritual, el cual se había entrelazado tanto con
la Tierra.
La llegada de la energía Crística, mi llegada a la Tierra, fue parcialmente preparada por ustedes. Yo
no habría podido venir sin una capa de energía presente en la Tierra que me
hubiese recibido, ‘agarrado’ como quien dice. Su energía proveyó el canal a
través del cual yo pude anclar la energía Crística a la Tierra. Fue un esfuerzo
conjunto, realmente. Sus corazones se habían abierto a mí, a lo que yo
representaba. En aquella época, ustedes fueron la parte de la humanidad más
abierta a recibir el amor y la sabiduría del corazón.
Un cierta humildad había surgido dentro de ustedes, en el
mejor sentido de la palabra: una rendición a no querer saber, a no querer
controlar o ‘manejar’ las cosas, y una genuina apertura a algo nuevo, algo que se
mantiene apartado del poder y del control, algo diferente. Y debido a esta confianza y apertura en sus corazones,
ustedes pudieron recibirme.
Yo era como un rayo de luz cayendo sobre la Tierra,
recordándoles a aquellos que estuvieran preparados su naturaleza angelical, su
núcleo divino. Ustedes fueron conmovidos por mí, por lo que yo les expresaba y
les radiaba desde mi núcleo interno, y desde entonces la energía Crística los
ha afectado profundamente, en aquella vida cercana a Cristo y en las vidas
después de ésta, hasta ahora. En todas esas vidas ustedes han intentado traer
la energía Crística abajo hacia la Tierra, de esparcirla de diversas maneras a
través de la enseñanza y de la sanación. Ustedes fueron trabajadores de la luz
inspirados y apasionados, trabajando duro y trayendo más justicia, equidad y
amor a este planeta.
En aquella era, la era del despertar de la energía
Crística, ustedes fueron aquellos que se opusieron a las religiones que estaban
demasiado rígidamente organizadas, a los modos autoritarios de dominar a las
personas. Ustedes lucharon por la libertad, por la emancipación de la energía
femenina, por los valores basados en el corazón en una era que aún era
escasamente conciente de esto. En los pasados dos mil años ustedes fueron
defensores de la libertad y fueron rechazados y perseguidos por esto. Fueron
castigados y torturados por ser quienes eran, y frecuentemente terminaron en la
estaca o en el cadalso. Ustedes traen mucho trauma emocional desde este
episodio de la historia.
En las luchas y en la resistencia que encontraron, el karma
de la Atlántida (y el galáctico) estuvo trabajando. Los roles ahora fueron
invertidos. Ustedes se volvieron las víctimas y atravesaron las profundidades
de la soledad, del miedo y de la desesperación. Llegaron a conocer íntimamente
el profundo dolor emocional del rechazo.
Esta fue su tercer Caída, una tercer
Caída en la Experiencia, y aquella que los llevó al corazón de su misión:
comprender la unidad implícita tanto en la Luz como en la Oscuridad,
aprendiendo qué significa realmente el Amor. Esta tercer Caída los ha traído
hasta el presente, hasta quienes ustedes son ahora.
Hoy, al borde de un nuevo ciclo, en estos tiempos de
transformación, ustedes están verdaderamente abiertos al significado de la energía
Crística. En su corazón está brotando una sabiduría que abraza y trasciende los
opuestos y que reconoce el único flujo divino en todas las diferentes
manifestaciones. Su amor no es un mero conocimiento abstracto, sino un puro,
real y sincero flujo desde el corazón, que alcanza a otros, y a la Tierra.
Ustedes ahora se reconocen a sí mismos en el semblante de los demás, ya sean
‘luz’ o ‘oscuridad’, rico o pobre, trabajador de la luz o alma terrestre,
hombre, animal o planta. El amor embebido en la conciencia Crística puentea la
brecha entre los opuestos y les da una tangible sensación de interconexión con
todo lo que es.
Como un ángel, ustedes alguna vez custodiaron el paraíso en
la Tierra. Se desconectaron de este estado de inocencia cuando participaron en
la danza del poder con energías que querían robarles el paraíso. A causa de
esto ustedes abandonaron el reino espiritual y encarnaron más profundo dentro
de la realidad material de la forma y de la ilusión. De ángel pasaron a ser
guerrero. Cuando ustedes encarnaron en la Tierra y pasaron a experimentar lo
que es ser un humano, fueron nuevamente tentados por el deseo de controlar las
cosas y esto condujo a la ruina de la Atlántida y de ustedes como un guerrero. Ustedes
regresaron a la Tierra para experimentar el lado bajo del juego del poder, para
sentir lo que es caer víctima de la agresión y de la violencia. La secuela de
esta última parte del ciclo aún está claramente presente en su forma de
experimentar las cosas y todos ustedes están trabajando duro para superar el
trauma al rechazo dentro de ustedes. Con eso ustedes terminan en el punto de
partida, en el punto donde esto comenzó. Regresan a su verdadera naturaleza
como un ángel, pero ahora como un ángel
plenamente encarnado, con un real y vivo conocimiento de los extremos de la
luz y de la oscuridad, del amor y del miedo. Ustedes son un ángel sabio y
compasivo, un ángel humano…
Yo siento un gran respeto por ustedes, por el increíble viaje
que han realizado. Estoy ahora ante ustedes como su igual. Yo estoy aquí como
un maestro y como un guía, pero también como un hermano y un amigo. Me gustaría
ofrecerles mi amor y mi amistad, no de una manera abstracta, sino como una
energía tangible de camaradería y de comprensión. Yo sé quiénes son ustedes. Ahora reconózcanse en mi semblante.
Ustedes están al final de grandes ciclos de tiempo, en los
cuales han atravesado muchas experiencias. Hoy quise hablar de la Atlántida, ya
que el reconocimiento de las energías que ustedes encarnaron ahí, puede
ayudarles a alcanzar un estado de paz y de integridad con ustedes mismos. La
energía de la Atlántida es la energía del gran poder mental, combinado con un
característico orgullo y arrogancia. Atrévanse a reconocer esta ‘energía
oscura’ dentro de ustedes, atrévanse a aceptar que han experimentado y vivido
eso alguna vez. Sientan que han sido el ofensor y el victimario así como
también la víctima. Admitir este hecho dentro de su conciencia abre la puerta a
la más grande sabiduría que ustedes pueden abrazar en su vida: la sabiduría de
no juzgar. Al ser concientes de su lado oscuro ustedes dejarán de juzgar a los
demás, por tener o no la razón, o incluso a ustedes mismos. Todos los motivos
para juzgar se eliminarán. El juzgar le cede el paso a la comprensión y a la
compasión. Entonces ustedes realmente comienzan a entender qué es el amor, que
significa el ‘trabajo de la luz’. La palabra ‘trabajo de la luz’ de hecho
sugiere falsamente que está teniendo lugar alguna clase de lucha entre la luz y
la oscuridad, y que el trabajador de la luz es aquél que está batiendo a la
oscuridad. Pero el verdadero trabajo de la luz no es nada de eso. El real
trabajo de la luz supone que ustedes son capaces de reconocer la luz del amor y
de la conciencia en todo lo que es, incluso
si está escondido detrás de máscaras de odio y de agresión.
Ustedes aún se ven tentados de juzgar a la realidad de la
Tierra, por ejemplo en el modo en que funciona la política o en el modo en que
la gente está tratando al medio ambiente. Es fácil decir que está todo mal y
sentirse un extraño en este planeta Tierra, alienado y desamparado. En esos
momentos intenten hacer contacto con la energía del ofensor dentro de ustedes.
Permítanse acceder a la energía de la Atlántida, la cual aún está ahí en su
memoria del alma, y sientan que ustedes
también han sido eso, e incluso que
eso estuvo bien. Todas sus ‘caídas en la experiencia’ finalmente los llevan
a ustedes al punto de partida y abren su corazón a la esencia de la creación de
Dios: el amor, la creatividad, la inocencia. Ustedes, quienes han experimentado
los extremos de la oscuridad y de la luz, todo a lo largo de su viaje no han
sido otra cosa más que un niño inocente del paraíso, emprendiendo viaje con un
espíritu de franqueza; valiente curiosidad y deleite por la vida. En este
viaje, ustedes sólo podrían aprender desde la experiencia. Las ‘caídas en la
experiencia’ no se podrían haber evitado, ya que ellas fueron los medios para
alcanzar algo nuevo y más satisfactorio. La esencia de su viaje es que ustedes
alcancen la sabiduría a través de la experiencia. Por lo tanto, por favor
reconozcan y honren el coraje de este ángel-niño que ustedes fueron. Vean su
vitalidad, coraje y perseverancia al aventurarse dentro de lo desconocido, y
luego sientan su propia inocencia, incluso en su lado más oscuro.
Yo les pido que se respeten, incluyendo su parte oscura.
Tan sólo sientan el poder y la propia conciencia de la energía de la Atlántida
por un momento. Hay un lado positivo en esto también. Ustedes fueron talentosos
de muchas maneras. Inviten a esa energía a entrar, aquí y ahora. Permitan que
regresen a ustedes la sensación de autoestima y dominio de sí mismo, y
perdónense por las atrocidades que tuvieron lugar en el pasado. Sí, ustedes han
infligido dolor a otros, ustedes fueron los agresores ahí…….pero sientan
también cómo han llegado a arrepentirse de esto profundamente, y cuánto se han
abierto ahora al genuino respeto por todo lo que está vivo. Cuando ustedes se
perdonan, se abren a la alegría de dejar de juzgar. Esa es la consecuencia,
ustedes ven: si reconocen su parte oscura y son capaces de perdonarse por eso,
ya no necesitan más juzgar ni a ustedes mismos ni a los demás. Esto es tal
placer para su alma…
Ustedes aún se exponen tan a menudo al tormento de sus
juicios. Se dicen a ustedes mismos que todavía hay tantas cosas que tiene que
realizar. Hoy, yo les pido que miren hacia atrás y que vean lo que ya han
realizado. Sean concientes de la profundidad de su viaje por todos estos
grandes ciclos de tiempo. Y no me miren más como a un maestro. Yo he cumplido
ese rol, dos mil años atrás, pero ese tiempo ya se ha terminado. Ustedes son
los Cristos de esta nueva era, ustedes traerán paz a un mundo de dualidad y de
polaridad, al irradiar la paz que yace dentro de sus propios corazones. Sientan
cómo están listos para este rol y simplemente déjenme ofrecerles un poco de
apoyo y aliento como su amigo y hermano. Somos uno.
© Pamela Kribbe 2006
Traducción: Sandra Gusella
Por preguntas o información, contáctenos en
sgusella@gmail.com
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