Pamela canaliza a María Magdalena

Queridos amigos preciosos, soy María Magdalena, vuestra hermana, y estoy aquí con un corazón amoroso. Mientras nos sentamos juntos una vez más me resulta muy familiar estar conectada con la realidad de la Tierra. Muy a menudo nos hemos sentado juntos en círculos de amigos de igual mentalidad y nos hemos sintonizado con el presente y con el futuro. Todo a lo largo de nuestras vidas, una y otra vez, ha sido para nosotros una fuente de apoyo y de estímulo reconocer en el otro el mismo anhelo, la misma sed de libertad y de alegría, y el mismo deseo de una conexión verdadera.

Estamos aquí juntos en el umbral de una nueva época y ustedes están en medio de una transición mayor. La energía de innovación que fluye ahora en la Tierra es como una gran ola que lava todo el campo del pensamiento, la acción y el sentimiento humano. De hecho, es una gran ola de Luz deslumbrante que impregna vuestra dimensión, y que los llama y los despierta. A veces también puede atemorizarlos, porque esta ola de energía nueva lanza todo en su vida hacia el caos. Parece como si nada de lo viejo pudiese seguir: el trabajo, las relaciones, la forma de subsistencia, y vuestra vida cotidiana – todo parece ir mal. ¿Por qué sucede esto? ¿Qué está pasando?

En esta época se les pide que se hagan presentes, y que se dejen bien en claro qué es lo que ustedes son y qué es lo que no son. Y con “ustedes” no me refiero a su personalidad terrenal como formada por influencias externas: sus genes (los cuales también vienen de afuera), sus padres, su crianza, la sociedad, la educación, etc. No es esa personalidad a la que me refiero cuando digo “ustedes”, sino a la esencia más profunda que ustedes son. Ese “ustedes” que es independiente de este mundo, e independiente de los prejuicios y de los patrones que han recibido de la sociedad; independiente incluso del cuerpo que habitan y cuyas reacciones también son influenciadas por estímulos externos. Desciendan una vez más dentro de su centro interior, ¡y recuerden quiénes son! Ustedes son la conciencia eterna que da y mantiene la vida de su cuerpo, y la que adquiere aquí experiencias terrestres temporales. Esta conciencia, que ustedes son en lo más profundo, ¡está plena de vida! Es creativa, radiante, aventurera, y al mismo tiempo comprende profundamente – está arraigada en el Ser.

Esta conciencia que ustedes son no es un principio abstracto; no es un Dios que vive muy lejos de ustedes sino una conciencia viva y palpable – ¡ustedes son Eso! Ustedes sienten esta conciencia fluir a través de ustedes en el momento en que se hacen más conscientes de quiénes son; cuando saben qué es lo que les trae alegría; cuando son tocados por lo que quieren – y también cuando sienten qué es lo que no quieren. Esta habilidad fundamental de discriminar, de ser capaces de decir sí o no a lo que se siente bien y a lo que no, los mantiene en contacto con quienes realmente son – con su alma y su Ser eterno. En esta época este Ser es invitado a tomar un lugar central en su vida, y a decidir qué es lo que les pertenece y qué es lo que no les pertenece.

La vida los invita ahora a tomar el camino de lo nuevo; la ola de energía nueva que, en este momento, impregna la atmósfera de la Tierra. Ustedes pueden reaccionar a esta invitación de dos maneras: o pueden acompañar la corriente de este flujo de la nueva energía o pueden oponerse a ella. Si ustedes confían en este flujo, y se permiten ser llevados por su fuerza, adquieren “alas” y son propulsados por su dinámica. Hacer esto puede causar temor, porque ustedes deben soltar lo viejo – ¡pero al mismo tiempo es emocionante y liberador!

También pueden ir en contra de la corriente de este flujo, temerosos de lo que lo nuevo les trae, y temerosos de soltar la aparente seguridad de lo viejo. Cuando sucede esto ustedes se embarcan en una lucha contra las fuerzas que quieren cambiar su vida desde adentro. Esa resistencia y oposición es una forma de lucha, y si ustedes se resisten a esa corriente poderosa ocurre una clase de ahogo. Luego las cosas se vuelven sofocantes y opresivas dentro y alrededor de ustedes. Pierden un anclaje sólido en su vida porque no confían en las grandes fuerzas que quieren conducir su vida.

Siempre es posible regresar y decir “sí” a la corriente. En el momento en que ustedes se rinden y sueltan, pueden experimentar nuevamente que están siendo llevados, que hay significado en este flujo y que los va a llevar a un lugar que es bueno y hermoso. Es importante ser conscientes de que cuando ustedes protestan aún están siendo alimentados por imágenes terribles del pasado. Hay imágenes ahí que ustedes consideran tan sagradas que no se les ocurre que ellas son, de hecho, la voz del miedo. Entonces puede pasar que están tan ocupados resistiéndose que no se dan cuenta de que se están oponiendo a algo bueno que quiere emerger en su vida. Piensan que pegarse a lo viejo es el modo correcto, sin ver y reconocer su miedo en esto. Vivir desde el miedo se ha vuelto un hábito cuando han crecido en una sociedad temerosa.

Hoy los invito, por medio de un simple experimento, a examinar en qué medida están sumidos en los viejos hábitos del miedo y cómo se resisten a lo que quiere fluir a través de su vida. Para ser capaz de hacer este experimento mental, primero debo decir algo más acerca del nuevo mundo en el cual están en el umbral. Imaginen la realidad de la nueva Tierra ante ustedes como una Luz Dorada. No vamos a describir los detalles físicos de ese mundo, sino que vamos a conectarnos con él a nivel energético para sentir su realidad. Piensen en sus sueños, sus visiones de una realidad nueva, amorosa en la Tierra, sostenida por conexiones desde el corazón. Vean la Luz Dorada resplandeciendo desde esa realidad y hagan contacto con esta Luz. Vean si pueden permitir a esta Luz Dorada en su cuerpo. Sientan cuán suave es, y aún así cuán amorosa y poderosa al mismo tiempo. Esta Luz Dorada conecta; no se resiste a nada. Dice “sí” a todo, y por lo tanto esta Luz puede penetrarlo todo, tanto las áreas de luz como las de oscuridad.

Ésta es la luz del Amor. Es la luz de la alquimia, la cual transforma la Oscuridad (plomo) en Luz (oro). En la Luz Dorada todo tiene significado y valor – no hay más lucha entre la Luz y la Oscuridad. Sientan el poder de esta Luz Dorada. Éste es el nacimiento de la conciencia Crística en todos ustedes. Cuando ustedes encarnan esta Luz, no necesitan alejarse de la oscuridad y de lo pesado, pueden estar completamente presentes en el mundo terrenal. Pueden ser quienes son en medio del caos del colapso del viejo sistema que está ocurriendo ahora en el mundo que los rodea. No tienen que ir a ningún lado, tan sólo mantengan en ustedes esta Luz Dorada. Es la luz del nuevo mundo; la Luz de su alma. No tienen que evitar el mundo. Lo único que se requiere de ustedes es permanecer fiel a esta Luz Dorada. Reconózcanla en ustedes mismos; se siente tranquila, calma y confiada en sí misma. Sientan la fuerza de esta energía que los lleva y los sostiene. Siéntanla hundida en sus pies; tiene sustancia. Sientan como esta Luz Dorada fluye a través de los pies hacia la Tierra y enciende semillas de Luz por todos lados.

En la era venidera, lo nuevo y lo viejo existen lado a lado. Aquí y allá emergen aperturas en el campo de energía de lo viejo, y eso sucede donde las personas están dispuestas a renunciar a sus valores y a extenderse hacia lo nuevo. Entonces puede tener lugar la afluencia de la Luz Dorada. Quizás eso sucede a través de ustedes porque ya están encarnando la nueva conciencia. Al estar en el mundo con su Luz Dorada ustedes pueden ser ustedes mismos y al mismo tiempo ofrecen algo nuevo al campo de energía de lo viejo. Ustedes son como un portal; una apertura a más libertad y bondad. Ustedes son ese portal para los demás por la energía que irradian, ¡y no tienen que ejercer un gran esfuerzo! Cuando la Luz Dorada fluye a través de ustedes hacia otra persona, sucede sin esfuerzo – simplemente a través de su presencia. El tiempo de hacer un gran esfuerzo y de pelear contra la oscuridad ha terminado. Ya no tienen que luchar – ¡no es vuestra lucha! Suelten toda la dinámica de luchar por o contra algo. Sólo necesitan estar aquí, y nutrir en ustedes esta Luz Dorada del futuro y ser fieles a ella.

Ahora examinaremos cuán enmarañados están aún en los viejos pensamientos de escasez basados en el miedo, y en el actuar desde una necesidad de poder y control. Ustedes han crecido con estos pensamientos, porque son parte de la energía colectiva de la Tierra. Recién ustedes reconectaron con la Luz Dorada de la Nueva Tierra, donde prevalecen la alegría y el bienestar. Observen ahora con su ojo interior la energía del viejo mundo, basada en la lucha, el miedo y la hostilidad, y vean esa energía ante ustedes. Obsérvenla neutralmente, sin miedo. ¿Qué color tienen esa energía? ¿Aparece como una niebla turbia y densa, sofocante y pegajosa? ¿Y cómo se siente? Hay mucho miedo en ella, y pueden observarla calmadamente porque no tienen nada que hacer con ella. No tienen que acompañarla y no tienen que oponerse a ella. Tan sólo está ahí y ustedes la observan.

Ahora sientan otra vez la presencia de la Luz Dorada dentro de ustedes, y luego observen en qué lugar la energía de lo viejo se aferra a ustedes. Miren especialmente en las áreas de su corazón y en los centros de energía más bajos: su estómago, ombligo y coxis. ¿Hay ahí cuerdas de energía que los retienen y aún los conectan con la vieja Tierra, la cual se rige por el miedo, el juzgamiento y la lucha? Observen esto calmadamente y pregúntense: “¿dónde aún estoy atascado a lo viejo?”. “Muéstramelo simple y claramente, porque quiero ser completamente consciente de eso.” En el momento en que lo viejo se vuelve visible, y ustedes sienten las cuerdas que los tiran hacia eso, sientan cuál es la energía que contiene. ¿Qué es lo que aún los enceguece hacia lo viejo – es miedo o incertidumbre? ¿Es un sentimiento de inferioridad que no se atreven a liberar, aunque saben que ya no les pertenece? ¿Qué es lo que los restringe y les impide enfocarse en lo que los hace grande?

Miren atentamente a lo que más los frena o los paraliza. Posiblemente podrían ver aparecer a un niño que encarna esta energía: un niño asustado, un niño indeciso, un niño reprimido o un niño agresivo. Por favor sean muy conscientes de la dinámica emocional que los empuja hacia lo viejo. Cuanto más claramente ustedes vean esta dinámica y la comprendan, más fácil será soltarla. No hay nada más liberador que ver claramente quiénes son. Aunque pueda ser desalentador darse cuenta de que aquí y allá aún están atascados en lo viejo, aún así siempre es mejor tener esto bien dentro de la línea de su visión, en lugar de presionar el miedo hacia abajo y no querer verlo. Y la luz dorada nunca condena. Admitan a todo lo que en ustedes aún tiene miedo o se resiste a lo nuevo, simplemente dejen que salga a la luz del día – es valioso y tiene significado. Cuando ustedes tienen una conciencia clara de las ataduras a lo viejo, y de cómo eso se siente, entonces ustedes permiten que la Luz Dorada fluya dentro de esa área. No traten de romper las cuerdas del pasado. Simplemente dejen que se impregnen de la Luz Dorada que es tanto cálida como llena de comprensión.

No luchen contra su miedo, su inseguridad y su dependencia de lo viejo; rodéenlo con la Luz Dorada, con empatía, con compasión. No es necesario luchar contra eso. La lucha lo vuelve peor, porque provoca resistencia en sus partes que aún no están dispuestas a unirse con lo nuevo. Dejen que el amor derrita y relaje estas partes. Si ustedes les dicen a sus partes atemorizadas, inseguras, que ellas son aceptadas como son, entonces ellas comienzan a soltarse y a cambiar. Quédense con todas sus partes miedosas y resistentes y no las repudien. Díganles que las aman y que van a avanzar junto con ellas. Las partes que aún tienen miedo o resistencia contienen un enorme poder ¡y ustedes no quieren perder eso! Ustedes quieren transformar esa energía, y eso sólo puede suceder a través del amor. Ahora permitan que un niño interior venga hacia ustedes, el niño que más claramente refleja la resistencia, el miedo y la desconfianza en ustedes mismos. Reciban al niño en su corazón, rodéenlo con la Luz Dorada, y díganle cuán felices están de haberlo encontrado. Ahora que está con ustedes, ustedes pueden ponerlo “bajo su ala” y cuidarlo, de modo que ya no esté sujeto a los impulsos y pinchazos del exterior que refuerzan ese miedo.

Ahora quisiera llevarlos a este año que está viniendo, el año 2012. Estamos en el último mes de este año 2011 y el invierno es una época natural de transición; una época de introspección y de preparación para lo nuevo. Muchas cosas se han dicho acerca de lo que traerá el año 2012. Quiero invitarlos a que suelten completamente todo lo que han oído o leído acerca del “2012”. Éstos también son estímulos externos. Yo preferiría para ustedes que se permitan sentir qué significa para ustedes. Permanezcan calmos y tranquilos; nada puede pasar y están a salvo. Sintonícense con el año 2012 y con lo que significa para ustedes, no para el mundo. Vean una luz o color apareciendo para este año y sientan la energía, sus posibilidades. Planteen preguntas para el año 2012: “¿Cuál es mi mayor potencial en este año y cómo puedo realizar mi potencial?” “¿Qué es importante que yo sepa o haga?”.

Imaginen que hay una ola muy alta en el mar y que ustedes se sientan encima de su cresta. Es tanto delicioso como emocionante ser llevado por esta ola. Dejen que lo que sienten dentro los lleve, porque estando encima de esta ola están en el flujo de sus mayores posibilidades y permiten que el flujo de la vida los lleve adonde eso estará. ¿Qué es lo que les pide que se rindan a ese movimiento, y cómo pueden decirle “sí” a eso? Permitan que el sentimiento que tienen en la cima de la ola actúe sobre ustedes. En la cima de esa ola ustedes están viviendo en la Verdad, y al volver a ese sentimiento pueden sintonizarse con lo que el próximo año les traerá. Siempre confíen en sus propias señales internas. Lo que es promovido para ustedes desde el mundo exterior como “información”, por ejemplo en forma de predicciones y expectativas del final de los tiempos, no necesariamente está basado en un pensamiento o intuición clara. Hay mensajeros que hablan desde el miedo, desde la necesidad de sensacionalismo y drama, y sus mensajes pueden confundirlos. Y también hay mensajes de Luz que emiten paz y tranquilidad. Hagan una distinción en base a lo que sienten. “¿Qué es lo que se siente bien para mí y qué no?” Ustedes son el ancla.

Finalmente, llevo vuestra atención a nuestro pequeño círculo, reunido aquí hoy en este espacio. Imaginen que en medio de nosotros hay un fuego que arde y nosotros estamos sentados a su alrededor – un fuego de calidez e inspiración. Todos somos nutridos por este fuego; es el fuego de nuestros corazones. Imaginen cómo brilla el resplandor del fuego sobre todas vuestras caras, cómo refleja su esperanza, anhelo, tristeza y duda. Cuando estas expresiones en vuestros rostros aparecen a la luz del fuego, se muestran como muy humanas y transparentes. En la luz cálida, suave del fuego, a todo se le permite ser lo que es. Permítanse esta calidez, esta Luz Dorada. Ustedes aún experimentan huellas de la Noche del Alma, de la oscuridad que los ha atrapado. Ahora rodéense con Luz cálida; siempre pueden hacer esto. Alábense, estén orgullosos de quienes son y comprendan cuán valientes son. Practiquen recordar todo lo que ya han logrado, lo que son capaces de hacer y lo que han soportado. Confirmen su propia grandeza y no vayan a los pensamientos que los hacen pequeños. Dejen que este fuego se expanda hasta formar una hoguera, para que las chispas lleguen más allá de este círculo para ser llevadas a muchas otras personas, y así el círculo se hace más grande. Éste es mi deseo para este Nuevo Año para ustedes y para todos aquellos que lean o escuchen esto más tarde.

María Magdalena

© Pamela Kribbe

Traducido del inglés por Sandra Gusella

---