Vuestra llegada a la Nueva Tierra
Pamela Kribbe canaliza a Jeshua
Queridos amigos:
Estoy aquí, soy Jeshua. Soy vuestro hermano. Estoy tan cerca de ustedes ahora. Y por “ahora” no sólo me refiero a este preciso momento, sino a esta era, a esta época del tiempo. Todos ustedes han cambiado mucho. A muchos de ustedes los conozco de tiempo atrás. Hemos estado juntos antes. En el tiempo en que viví en la Tierra, yo me encontré con muchos de ustedes. Y durante los siglos inmediatamente después de que viví aquí, muchos de ustedes se sintieron atraídos a encarnar en la Tierra. Ustedes sintieron una apertura en la conciencia colectiva de los hombres. Ustedes quisieron contribuir a esa apertura, al despertar de la conciencia. Una nueva conciencia fue sembrada en aquellos tiempos. Como ustedes saben, se encontró con mucha resistencia. Todos ustedes han experimentado esta resistencia en su propia vida, en esta vida y en vidas pasadas también. Ustedes han sentido cómo se siente ser diferente a los demás y han sentido soledad debido a esto. Ustedes son los precursores, los pioneros de una nueva conciencia. En estos tiempos, en esta época hay una apertura en la conciencia humana en todo el mundo. Yo estoy aquí para celebrar esto con ustedes. Realmente una nueva era está naciendo ahora mismo. Tal vez ustedes no siempre lo sienten así, porque por momentos se sienten preocupados. Pero yo puedo ver muy claramente el despertar en vuestras almas. Estoy aquí para saludarlos y honrarlos desde lo más profundo de mi corazón.
Mi querida hermana María Magdalena está aquí conmigo ahora, así como otras almas afines.
(Algunas personas comienzan a llorar…)
Es lindo ver vuestras lágrimas. Es un signo de vuestra conexión con nosotros. Estamos aquí para celebrar con ustedes. Lo que más quisiéramos hacer en este momento es lavarles los pies, arrodillarnos ante vuestros pies y lavarlos. Es un gesto de nuestro respeto y honor por ustedes. No queremos que nos miren hacia arriba como maestros; nosotros somos vuestros amigos, vuestros hermanos y hermanas. Entonces, los invitamos a sentirse felices con nosotros porque la nueva era realmente ha comenzado. Sabemos que ustedes aún se sienten preocupados por las cargas del pasado y del futuro. Pero los invitamos a tener otra mirada sobre esas cargas. Es debido a que han atravesado las profundidades del miedo, de la pena y de la tristeza, es porque han vivido a través de eso que ahora hay un espacio en vuestros corazones para la compasión. La verdadera compasión por ustedes mismos y por los demás. Esto es todo lo que es la conciencia Crística. Realmente comprender por lo que otra persona está pasando sin juzgarlo; simplemente estando con esa otra persona de alma a alma. De eso se trata la semilla Crística y la conciencia Crística. Ustedes están ahí ahora. No tienen que trabajar tan duro en ustedes mismos o pensar que tienen que mejorar. Deseamos que pudieran verlo desde nuestro punto de vista: que ustedes son perfectos como son.
Pero nos damos cuenta de que en vuestra vida diaria ustedes aún luchan con emociones dolorosas. Entonces les pedimos ahora que viajen con nosotros en una pequeña experiencia imaginaria. Imaginen que están parados en frente de un portal. El portal ya está abierto y ustedes están parados en el umbral de la Nueva Era. Ya pueden sentir la energía de esta nueva Tierra, la paz y la armonía. Y pueden ver la belleza de la naturaleza. Puede verse un poco como el país en el que estamos ahora (en el sur de Francia, en la cima de una colina), porque la belleza y lo silvestre de la naturaleza aquí se asemejan a la energía de la Nueva Tierra. Y mientras están parados cerca de este portal, de esta puerta, están sosteniendo la mano de un niño o niña. Ustedes perciben cómo hay una excitación en ese niño/a, a medida que quiere avanzar hacia el nuevo territorio, pero también pueden sentir miedo en el cuerpo de él o ella. Parece ser un gran paso dejar lo viejo detrás y entrar a la Nueva tierra. El niño o niña aún está atemorizado por todo lo que le han dicho sus padres y la sociedad. Él o ella tienen miedo de confiar y dar el gran salto hacia adelante.
Ahora sientan la mano de este pequeño niño o niña en la vuestra. Este niño/a refleja vuestra parte traumatizada que siente miedo de dar el próximo paso. Ésta es la tragedia que a veces notamos en ustedes. Por un lado anhelan tanto ir a casa, experimentar otra vez la paz y la armonía que les pertenece. Por otro lado, tiene miedo de soltar lo viejo, incluso si es muy doloroso pegarse a eso. Ahora los invitamos a abrazar al niño/a y a tranquilizarlo. Sientan cómo se relaja en sus brazos. Ahora vean si quiere dar algunos pasos hacia adelante. Pero no lo juzguen si aún se siente atemorizado. Díganle al niño que ustedes serán su guía.
Aunque ustedes aún están en el umbral, sólo donde comienza este nuevo territorio, respiren su energía. Realmente están llegando a casa ahora, y el Hogar está en la Tierra. A menudo han pensado que el hogar está en otro lugar, en algún lugar allá arriba en el cielo de donde ustedes vienen. Pero el propósito de vuestro largo viaje a lo largo de muchas vidas es traer el cielo abajo hacia la Tierra, y compartirlo con sus compañeros humanos. Ustedes tienen el propósito de traer la energía del cielo abajo hacia la Tierra. En el pasado con frecuencia tuvieron que esconderse porque tenían este deseo. El tiempo de esconderse ahora ha terminado. Vuestra presencia es necesaria aquí y ahora. Ustedes aún son los precursores, los pioneros de la conciencia. Y les estamos pidiendo que ahora se alcen de pie en vuestro poder y que estén orgullosos de ustedes mismos. Esto no tiene nada que ver con el ego; se trata de realmente expresar vuestra radiación del alma.
También, los estamos alentando a que se reúnan como trabajadores de la luz y que compartan vuestras energías. Es ahora el tiempo de unirse juntos de un modo muy flexible y abierto. Al abrirse unos a otros, ustedes aceleran su proceso de sanación. Especialmente en esta región de vuestro país las energías son muy adecuadas para este proceso de sanación. Los invitamos a que sientan esto por ustedes mismos. Sientan la energía de la Tierra a medida que llega a ustedes desde la tierra debajo de sus pies. Ella es abierta y quiere recibirlos. Ella quiere apoyarlos y proveerlos con todo lo que necesiten como seres humanos. A un nivel material, ustedes verán que en la Nueva Tierra las personas estarán más satisfechas con medios simples, pero no experimentarán esto como una carencia, como una clase de pobreza. Ellos serán más respetuosos hacia la Tierra y tendrán un estilo de vida que es más armónico con la naturaleza. En lugar de alimentarse a sí mismos con cosas materiales ellos se sentirán satisfechos con “alimento” espiritual. Se sentirán nutridos por las relaciones que tendrán entre ellos, con la naturaleza y con las demás personas.
Los estamos invitando a establecer un ejemplo de este estilo de vida en vuestra propia vida. Compartir vuestras energías con otros trabajadores de la luz los ayudará a permanecer animados y enfocados en sus propios objetivos. Celebren juntos vuestra llegada a la Nueva Tierra. Éste es nuestro mensaje de hoy. Estamos llenos de esperanzas y de alegría por ustedes.
© Pamela Kribbe
Traducido del inglés por Sandra Gusella